Cataratas del Rhin y Schaffhausen
Relato sobre la tarde que dedicamos a las cataratas del Rhin, con paseo en barco hasta la misma caída de agua, y la ciudad de Schaffhausen
Suiza, qué maravilloso país. Hemos estado ya unas cuantas veces por allí, y la verdad es que nos encanta. Es muy caro, bastante más que España, sí, así es. Pero aun así merece mucho la pena. No sé si es porque es otro nivel en capacidad de organización, o simplemente que debido a los precios va menos gente que, por ejemplo, a Francia o Italia (o quizá una mezcla de ambas cosas). Pero lo que sí sé es que en Suiza realmente siento que estoy de vacaciones. La tranquilidad, el relax, el poder ir a un teleférico o cualquier otro atractivo turístico sin agobios ni cantidades inmensas de gente...
Tanto a Patricia como a mí nos encanta esa sensación. Suiza está llena de rincones donde relajarte y olvidarte del mundanal ruido, como suele decirse. Nosotros para compensar el presupuesto, lo que hacemos es llevar una maleta llena de comida desde España (embutido, sobres de pasta deshidratada, etc.) y comprar ya en Suiza cosas como huevos, leche, pan, queso (nos encanta el queso suizo), etc. De esta manera, los desayunos y cenas los hacemos en el apartamento que hayamos cogido para la ocasión, y la comida, eso siempre en restaurante (es caro, sí, pero nunca hemos comido mal en Suiza).
Un consejo que daría a cualquiera que esté dudando si viajar a Suiza, es que lo haga cuanto antes. Creo que la mayoría de la gente no es consciente de que monumentos como las pirámides, el Taj Mahal, las grandes catedrales europeas... van a seguir ahí durante muchas generaciones, pero los grandes glaciares de los Alpes, esos monumentos naturales grandiosos y profundamente bellos... van a desaparecer en poco tiempo, y cuando lo hagan será para siempre.
De hecho, ya están desapareciendo, llevan años haciéndolo. Hoy, todos ellos son una sombra de lo que fueron, pero los más grandes todavía tienen un tamaño suficiente como para impresionar a cualquiera. Dentro de apenas diez años (escrito en Noviembre de 2024), muchos de ellos habrán desaparecido, y los que sobrevivan tendrán un tamaño mínimo.
Es ahora cuando hay que ir, aunque solo sea para que dentro de veinte años podamos decir "Yo estuve allí cuando ese valle lo ocupaba un glaciar tan grande que parece mentira que ahora no quede nada". Son monumentos soberbios que mucha gente se lo está perdiendo, y solo lo echarán de menos cuando ya sea tarde.
Hemos estado tres veces en Suiza. La primera fue un viaje de 4 dias por Alemania con un grupo de amigos en 2011, en el que hicimos una incursión en Suiza para visitar las cataratas del Rhin.
Relato sobre la tarde que dedicamos a las cataratas del Rhin, con paseo en barco hasta la misma caída de agua, y la ciudad de Schaffhausen
La tercera vez, en 2023, como parte de un viaje más largo en el que veníamos del lago Como, en Italia. Atravesamos el cantón de Ticino para llegar al valle de la Engadina, donde estuvimos tres días recorriendo toda la zona, disfrutando del valle, y de sus glaciares también. Después fuimos a la zona de los Dolomitas, también en Italia.
Relato completo con fotos y recomendaciones del día que pasamos en el cantón de Ticino, subiendo al funicular de Monte Bre, junto al lago de Lugano, y disfrutando del trineo y balneario de Monte Tamaro, camino de la Engadina.
Relato completo con fotos y recomendaciones de los tres días que pasamos recorriendo el valle de la Engadina, subiendo a sus funiculares y teleféricos, y disfrutando de sus lagos, glaciares y pueblos.
La segunda y principal vez que estuvimos en Suiza, fue un viaje más largo, en 2019, en el que recorrimos gran parte de los Alpes suizos durante dos semanas, especialmente los valles más alpinos. Por entonces Inés tenía solo dos años y medio, y aguantó como una campeona. Estaba claro que teníamos una gran viajera entre nosotros.
Y los artículos de este viaje:
Relato sobre el día completo que dedicamos a ir desde el aeropuerto de Ginebra hasta Brienz, haciendo paradas en el pueblo medieval de Gruyeres para comer, y en la fábrica de chocolate Cailler
Relato sobre el día completo que dedicamos a Grindelwald, visitando la garganta glaciar Gletscherschlucht y el teleférico de First, incluyendo sus paradas intermedias, donde comimos junto a una zona infantil increible, y el mirador First Cliff Walk by Tissot arriba del todo.
Relato sobre el día completo que dedicamos a esta fantástica excursión, subiendo a la estación de tren más alta de Europa a 3454 metros de altura, y por la tarde, un poco de diversion en el trineo de Pfingstegg
Relato sobre el día completo que dedicamos por la mañana al funicular de Sunnega, comiendo allí mismo con vistas fantásticas del Cervino, y por la tarde viaje en el tren del Gornergrat, uno de los más espectaculares de Europa, hasta su estación superior a 3.089 metros.